Dios te salve, Cruz preciosa, bandera de la vitoria d'aquel gran Rey de la gloria. Espejo muy glorioso, si en ti mirarnos queremos, siempre nos apartaremos del peligro peligroso. Arbor de fruto precioso, bandera de la vitoria d'aquel gran Rey de la gloria. En ti tengamos amor, pues en ti, por ti, contigo es vencido el enemigo siendo Cristo el vencedor. Sirvamos al Redentor, teniendo a ti por memoria d'aquel gran Rey de la gloria. Navío do navegamos, y al tiempo de las afrentas muy humildes te adoramos seguros de las tormentas. Contigo nos esforzamos, bandera de la vitoria d'aquel gran Rey de la gloria.