1. Oculto en blanco velo, el vivo pan del cielo aquí presente está, bajado de la altura, es gracia y es ternura que vida eterna al alma da. 2. Su Corazón es fuente, que mana esternamente en límpido raudal, el agua de la gracia que fortalece y sacia la sed del mísero mortal. 3. Oh Dios Sacramentado, haz que tu rostro amado que sobre el santo altar oculto aquí adoramos, un día merezcamos allá en la gloria contemplar.